Hay pasteles que nos regresan a la cocina de casa, a esos momentos donde la mantequilla derretida perfuma el ambiente y las nueces tostadas anuncian que viene algo rico. Este Pastel Casero de Mantequilla y Nueces, con su miga suave, su aroma irresistible y su glaseado dulce y brillante, es uno de esos postres que nunca fallan. Es sencillo, elegante y siempre sorprende: ideal para reuniones familiares, meriendas especiales o como ese caprichito dulce que nos merecemos.
A continuación encontrarás un artículo completo de 1000 palabras, donde no solo tendrás la receta, sino detalles, consejos, variaciones y trucos profesionales para que siempre te quede perfecto
Un pastel con historia y sabor a hogar
Los pasteles de mantequilla son clásicos en muchísimas cocinas del mundo. No necesitan decoraciones complicadas ni técnicas difíciles para conquistar. Su magia está en lo simple: mantequilla de buena calidad, azúcar, huevos frescos y una harina tamizada que le da esa textura tan suave y delicada.
Cuando le añadimos nueces tostadas, el pastel se vuelve aún más especial. El aroma a frutos secos, ese crocante suave y el sabor ligeramente caramelizado combinan perfectamente con la miga húmeda. Es un pastel que sabe a tradición, pero también a celebración.
Ingredientes que importan
La calidad de los ingredientes hace una diferencia enorme en esta receta.
Aquí tienes lo que necesitas:
Para el pastel
- 1 taza mantequilla sin sal, suavizada
- 2 tazas azúcar granulada
- 4 huevos grandes
- 3 tazas harina todo uso
- 1/4 cdita polvo de hornear
- 1/2 cdita sal
- 1 taza crema agria
- 1 cdita extracto de vainilla
- 1 cdita extracto de mantequilla
- 1 taza nueces picadas y ligeramente tostadas
Para el glaseado
- 1/2 taza azúcar en polvo
- 1 cda leche
- 1 cda mantequilla derretida
- 1/2 cdita extracto de vainilla
- 1/4 taza nueces picadas
- 2 cdas jarabe de caramelo (opcional)
Preparación Paso a Paso Detallada
1️⃣ Preparar el molde y precalentar
Precalienta el horno a 163°C (325°F). Engrasa muy bien un molde tipo bundt o uno redondo de 25 cm. Pásale un poco de harina también para evitar que el pastel se pegue. Este paso es clave para un desmolde perfecto.
2️⃣ Cremar la mantequilla y el azúcar
En un bol grande, bate la mantequilla con el azúcar de 5 a 7 minutos, hasta que la mezcla esté pálida, doble su volumen y se vea cremosa.
Este paso es la base del éxito: aquí entra aire en la masa, logrando una textura suave y esponjosa.
3️⃣ Añadir los huevos uno por uno
Agrega cada huevo y mezcla muy bien antes de incorporar el siguiente. Esto evita que la mezcla se corte y asegura una textura pareja.
4️⃣ Mezclar los ingredientes secos
En otro bol, combina harina, polvo de hornear y sal. Tamízalos si quieres un pastel aún más ligero.
5️⃣ Integrar secos y crema agria
Ve incorporando la mezcla seca en tres partes, alternando con la crema agria. Empieza y termina con los secos.
Esto mantiene la masa estable y evita sobrebatir.
6️⃣ Añadir sabores y nueces
Agrega vainilla, extracto de mantequilla y nueces tostadas. Mezcla suave para no romper la aireación conseguida.
7️⃣ Hornear la magia
Vierte la masa en el molde. Alisa la superficie y lleva al horno 60–70 minutos. El pastel estará listo cuando un palillo salga limpio.
Si notas que se dora muy rápido, cúbrelo con papel aluminio.
8️⃣ Enfriar y desmoldar
Deja reposar 10 minutos en el molde. Luego desmolda sobre una rejilla y deja enfriar completamente antes de glasear.
Glaseado perfecto
9️⃣ Preparar el glaseado
Mezcla azúcar en polvo, leche, mantequilla derretida y vainilla. Ajusta la textura:
- Si está espeso → añade gotitas de leche
- Si está líquido → añade azúcar glas
🔟 Decorar
Vierte el glaseado sobre el pastel frío. Añade nueces picadas encima y, si quieres un toque especial, un hilo de jarabe de caramelo.
Tips de Experta para que te salga PERFECTO
✨ Usa mantequilla de buena calidad; marca la diferencia en sabor.
✨ La crema agria hace que el pastel quede más húmedo y tierno.
✨ Tostar las nueces realza muchísimo el sabor.
✨ No abras el horno en los primeros 40 minutos o el pastel puede hundirse.
✨ Déjalo enfriar bien para cortar rebanadas perfectas.
Variaciones deliciosas
- Con chocolate: añade ½ taza de chispas.
- Con especias: canela, nuez moscada o cardamomo.
- Con cítricos: ralladura de naranja o limón.
- Con glaseado más espeso: reduce la leche y añade más azúcar glas.
Cómo servirlo para lucirte
Este pastel queda hermoso por sí solo, pero puedes acompañarlo con:
- helado de vainilla
- crema batida
- frutos rojos frescos
- café o chocolate caliente
Perfecto para cumpleaños, cafés especiales, cenas familiares o meriendas de domingo.
Conservación
✔️ A temperatura ambiente: 3 días
✔️ Refrigerado: hasta 6 días
✔️ Congelado: 2 meses (sin glaseado)
Envuélvelo bien para conservar su humedad.
Conclusión
El Pastel Casero de Mantequilla y Nueces es uno de esos postres que nunca pasan de moda. Es suave, aromático, generoso y con un sabor clásico que hace feliz a cualquiera. Prepararlo es sencillo, pero el resultado parece de pastelería. Con sus nueces tostadas y su glaseado dulce, se convierte en un pastel perfecto para celebraciones, reuniones o simplemente para disfrutar un día especial.